La 97 Jornada Corresponsables ha servido para analizar la situación de la RSE en Cantabria y conocer de primera mano la implicación de empresas y grupos de interés por el desarrollo sostenible. En la inauguración, Ana Belén Álvarez, directora general de Trabajo del Gobierno de Cantabria, ha recordado que “desde la Consejería de Hacienda y Empleo y desde Cantabria Responsable, queremos animar a todas las empresas cántabras a que apuesten por la gestión de la RSE y su comunicación, porque su integración ayuda a que sean más competitivas”. Para Álvarez, “la RSE está íntimamente ligada a los valores éticos y se trata de hacer bien las cosas, gestionando impactos y oportunidades”.
El presidente de la Cámara de Comercio de Cantabria, Modesto Piñeiro, indicó que “nuestro objetivo es conseguir que Cantabria sea una región más rentable, amigable y sostenible y por eso estamos impulsando la RSE entre las empresas, sobre todo entre las pymes”. Así, la Cámara está desarrollando un plan en el que durante 2015 participaron 37 empresas y 56 en 2016 para integrar la RSE en su gestión. Piñeiro consideró que con la aprobación de los ODS y el Acuerdo de París “se abre una gran oportunidad para todas las empresas, organizaciones y estados para trabajar a favor del desarrollo sostenible”.
“Apostamos por la RSE como generación de valor que nos hace mejor compañía”, apuntó Elena Iglesias, responsable de Comunicación Externa y RSC Zona Norte de Viesgo, para quien “la RSE es básica cuando te preguntas qué quieres ser de mayor. Por eso es un ejercicio de mejora continua que necesita integrarse en todas la compañía”. Por su parte, Pablo Martín, director de Corresponsables España, señaló que “la 97 Jornada Corresponsables es parte del compromiso de Corresponsables con la difusión y promoción de la RSE por toda España, donde estamos presentando el Anuario Corresponsables en todas las comunidades autónomas”.
LA AGENDA DE DESARROLLO SOSTENIBLE POST2015
La primera mesa de debate ha puesto el foco en la agenda de desarrollo sostenible post2015. Diversas empresas como Leroy Merlin, Tirso y Viesgo han expuesto sus iniciativas en la materia.
Yago Ramos, responsable del Área de Regulación de Infraestructuras de Viesgo, recordó que en la compañía ya se hablaba en los libros de cuentas anuales de 1920 de “fomentar la sostenibilidad en Cantabria, desarrollando el acceso a la electricidad en toda la región, lo que facilitaría el desarrollo económico”. Ramos destacó que “la gestión del desarrollo sostenible ha calado en las empresas, también en las administraciones públicas y cada vez más en los ciudadanos. Una buena noticia es que España vaya a ratificar el Acuerdo de París sobre cambio climático a través la Unión Europea”. Ramos comentó que “uno de nuestros retos es hacer que la luz sea accesible para todos y tenemos que trabajar para generar una energía más limpia y eficiente”.
Mientras, Elena Iglesias, reconoció que “la RSE tiene un valor intrínseco para Viesgo y nos hace mejor compañía, integrando las demandas de la sociedad. Por ejemplo, para nosotros los clientes son fundamentales y estamos muy cerca de ellos, explicándoles el coste de la factura, de dónde procede la electricidad que consumen y sus demandas”. Iglesias repasó también el compromiso social de la compañía en materia cultural, medioambiental, educativa y deportiva y destacó el programa de lucha contra la pobreza energética y cómo colaboran con las administraciones públicas para no dejar sin suministro a nadie que no pueda hacer frente al coste de la factura de la luz.
El director de Leroy Merlin Santander, Óscar Gil, afirmó que “2015 había sido un año clave para el impulso del desarrollo sostenible con la aprobación de los ODS y el Acuerdo de París. En nuestra caso, integramos la gestión responsable a través de nuestro Marco de RSE, que en breve presentaremos una nueva versión para atender a las demandas de nuestros grupos de interés”. Destacó el compromiso medioambiental de la compañía “para disminuir nuestro impacto tanto a nivel de emisiones como de residuos y a nivel logístico”. Puso como ejemplo la gama de las Ecopciones, que ofrece más de 8.000 referencias de productos para el hogar que ahorran energía y agua.
“Aunque no estamos obligados a cumplir con el Código de Buen Gobierno, porque no somos una compañía cotizada, el buen gobierno, el compromiso con la ética y la lucha contra la corrupción son uno de nuestros pilares. Tenemos un Código Ético y de Conducta para todos los colaboradores, que hemos extendido a nuestros principales proveedores, que ya lo han firmado más de 600”, dijo Gil, quien afirmó que “nuestro principal reto en RSE es crear empleo de calidad”. Así, destacó que desde la tienda de Santander habían sido los pioneros en desarrollar un programa de becas para estudiantes de FP, que después pasan a trabajar en la plantilla. Ya se ha extendido a las 65 tiendas de Leroy Merlin en España y va por su sexta edición.
Francisco Dueñas, director de Estrategia e Innovación de Tirso, expuso como una mediana empresa cántabra integra laRSE en su gestión: “Para nosotros la RSE no es un coste sino una oportunidad para ser mejor empresa. En nuestro caso, al ser un grupo familiar la ética y los valores son la base de toda nuestra actividad”. Dueñas indicó que habían dejado de trabajar con unas 10 empresas por infringir el Código Ético.
Dueñas animó a otras pymes a que integren la RSE en su día a día porque “muchas veces hacen cosas que no saben que son RSE, pero es necesario que más pymes descubran el valor de la RSE. Por eso, programas de promoción de la RSE como el de la Cámara de Comercio de Cantabria son claves”.
El director de Estrategia e Innovación de Tirso destacó el compromiso de la compañía con el medio ambiente, con el impulso del emprendimiento, la acción social y la innovación. En este último ámbito, comentó que en 2011 habían creado Cellbiocan, empresa biotecnológica, que actualmente se está trabajando en la segunda fase del Proyecto Sentir, basado en la detección de células tumorales en sangre, con la colaboración del Hospital Marqués de Valdecilla, la Universidad de Cantabria, IK4Tekniker y el Igualatorio Médico Quirúrgico.
Fuente Corresponsables